Como mostraron Max Scheler y Erwin Straus, el pudor se encarga de preservar lo más íntimo del ataque de lo público. Lo que retenemos y guardamos con pudor, manifiesta Viktor Frankl, no debe convertirse en algo manido, en centro de admiración, no debemos descubrirlo, no debemos convertirlo en objeto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario