jueves, 2 de febrero de 2017

El ecologista alaba al cosmos, mientras que el papa Francisco alaba al paso de la nada al ser.

Decía Chesterton que cuando decimos que el ecologista alaba la creación entera, queremos significar, generalmente, que sólo alaba al cosmos entero. Pero el Papa Francisco cuando alaba precisamente la creación es en cuanto acto de creación. Alaba el paso o transición de la nada al ser.

San Francisco de Asis.
San Francisco de Asís, decía Chesterton, no llamó madre a la Naturaleza; llamaba hermano a un determinado gorrión o jumento. Si hubiese llamado tía a un pelícano o tío a un elefante (cosa que pudo hacer), también hubiera querido
significar que se trataba de criaturas individuales, a las que su Creador asignó un lugar concreto, y no de meras expresiones de la energía evolutiva de las cosas.


San Francisco al igual que el Papa Francisco dan gracias al Creador por todas las maravillas de la naturaleza, mientras el peor momento del ateo es aquel en que se siente agradecido y no sabe a quién dar gracias, según relata el poeta ingles Dante Gabriel Rossetti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario