miércoles, 24 de enero de 2018

No se puede pedir reconocimiento aniquilando al otro.


El Papa Francisco en su viaje a Chile ha manifestado que “hay que construir la unidad en el diálogo, una unidad que no es uniforme, porque la que reclama Jesús es “una riqueza que cada pueblo puede ofrecer”, “es una diversidad reconciliada, porque no tolera que en su nombre se legitimen las injusticias personales o comunitarias”, y que rechaza “la lógica de creer que existen culturas superiores o inferiores”. 

“Es imprescindible defender, añade el Papa, que una cultura del reconocimiento mutuo no puede construirse en base a la violencia y destrucción que termina cobrándose vidas humanas. No se puede pedir reconocimiento aniquilando al otro, porque esto lo único que despierta es mayor violencia y división. La violencia llama a la violencia, la destrucción aumenta la fractura y separación. La violencia termina volviendo mentirosa la causa más justa. Por eso decimos no a la violencia que destruye, en ninguna de sus dos formas”.

“Estas actitudes son como lava de volcán que todo arrasa, todo quema, dejando a su paso sólo esterilidad y desolación. Busquemos, en cambio, el camino de la no violencia activa, "como un estilo de política para la paz".Busquemos, y no nos cansemos de buscar el diálogo para la unidad.”

No hay comentarios:

Publicar un comentario