sábado, 5 de febrero de 2022

Una gran formación académica no son suficientes para que un inversor sea inteligente


Cuenta Benjamin Graham que en los años de crecimiento de finales de la década de 1990, cuando los valores tecnológicos parecían duplicar su cotización todos los días, la noción de que se podía perder prácticamente todo el dinero invertido parecía absurda; sin embargo, a finales del año 2002, muchas de las empresas punto com y de telecomunicaciones habían perdido el 95% de su valor o más. Después de perder el 95% del dinero, es necesario ganar un 1900% simplemente para volver al punto de partida. La asunción de riesgos alocados puede colocarle en una situación tan desesperada que le resulte prácticamente imposible recuperarse.Hay pruebas de que un elevado coeficiente intelectual y una gran formación académica no son suficientes para conseguir que un inversor sea inteligente.En 1998, Long-Term Capital Management L. P., un fondo de inversión de gestión alternativa dirigido por un batallón de matemáticos, informáticos y dos economistas ganadores del Nobel, perdieron más de 2.000 millones de dólares en cuestión de semanas, al apostar una enorme cantidad a que el mercado de bonos volvería a una situación “normal”. Sin embargo el mercado de bonos siguió empeñado en que su situación fuese cada vez más “anormal”, y LTCM se había endeudado hasta un nivel tal que su quiebra estuvo a punto de hundir el sistema financiero mundial.

No hay comentarios:

Publicar un comentario