jueves, 12 de mayo de 2016

Como Roma solucionó la decadencia.


Es interesante comparar la situación de los últimos años de la República de Roma con la sociedad en que nos toca vivir.En Roma existía el problema del rápido aumento de la riqueza, y de la igualmente rápida decadencia de las antiguas normas de conducta pública y privada. La vida política llegó a una corrupción hasta entonces desconocida.
Cesar Augusto.
Cesar Augusto(63 a.C - 14 d.C), primer emperador romano, quiso terminar con la corrupción moral y para ello se esforzó para garantizar el triunfo de la tradición romana. Contuvo la inundación de la influencia helenística y abrió todas las puertas por donde se pudiese dar entrada al genio romano y a la experiencia que habían acumulado. Reconstruyó los templos, restableció las normas de moral y de conducta, estimuló nuevamente el amor al trabajo y la devoción al deber.
Estimuló a los poetas y a los historiadores a divulgar los antiguos ideales romanos y a enorgullecerse de ellos. Su buen sentido le atrajo la simpatía de la clase media de Italia, todavía sana en el fondo, entre la que encontró administradores y gobernadores provinciales honrados.En gran parte sus esfuerzos tuvieron éxito porque existía el deseo general de que así fuera. Con el tiempo contribuyeron, desde Occidente, a llevar a cabo la unidad de la humanidad,hasta donde era posible entonces, por medio de las ideas occidentales sobre la personalidad humana y la libertad reglamentada.

El Papa Juan Pablo II, en Santiago de Compostela, gritaba a Europa para que volviese a sus raíces.

No hay comentarios:

Publicar un comentario