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La búsqueda de un objetivo trae orden a la conciencia |
Lo que experimentamos (gozo o dolor, interés o aburrimiento) se representa en la mente como información. Si somos capaces de controlar esta información, podremos decidir cómo será nuestra vida. El estado óptimo de experiencia interna es cuando hay orden en la conciencia. Esto sucede cuando la atención se utiliza para obtener metas realistas y cuando las habilidades encajan con las oportunidades para actuar. La búsqueda de un objetivo trae orden a la conciencia porque una persona debe concentrar su atención en la tarea que está llevando a cabo y olvidarse momentáneamente de todo lo demás. Estos períodos de lucha para superar desafíos son lo que la gente define como los mejores momentos de su vida. Una persona que ha conseguido controlar la atención y la ha utilizado conscientemente para obtener una meta no puede más que desarrollarse y convertirse en un ser más complejo. Al adiestrar nuestras habilidades, al enfrentarnos a desafíos superiores, tal persona se convierte, cada vez más, en un individuo extraordinario, escribe Mihály Csíkszentmihályi profesor de psicología en la Universidad de Claremont.
Cuando las personas empiezan a pensar que el progreso es
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Mihály Csíkszentmihályi |
inevitable y que la vida es fácil, pueden perder rápidamente el valor y la determinación a la hora de enfrentarse a los primeros signos de la adversidad, dice Csíkszentmihályi. Y mientras se dan cuenta de que lo que creían no era del todo verdad, abandonan la fe en todo lo demás que habían aprendido. Faltos del apoyo al que estaban acostumbrados gracias a los valores culturales que poseían, se hunden en un pantano de ansiedad y apatía. Tales síntomas de desencanto no es difícil observarlos hoy a nuestro alrededor. Los más obvios tienen que ver con la negligencia que se extiende y que afecta a tantas vidas.
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ansiedades y depresiones |
Para sobreponerse a las ansiedades y depresiones de la vida actual,los individuos deben independizarse del entorno social hasta un grado en el que no respondan exclusivamente en términos de sus recompensas o castigos. Para obtener esta autonomía una persona debe aprender a darse recompensas. Tiene que desarrollar la habilidad de encontrar diversión y propósito sin tener en cuenta las circunstancias externas. Este desafío es a la vez más fácil y más difícil de lo que parece. Es más fácil porque la habilidad para hacer esto está al alcance de todas las personas, y más difícil porque requiere de una disciplina y perseverancia que han sido algo escasas en todas las épocas y tal vez lo son más aún en el presente. Y antes de todo esto, conseguir el control sobre la experiencia requiere un cambio drástico de actitud sobre lo que es importante y lo que no lo es, manifiesta Csíkszentmihályi.
El estado óptimo de experiencia interna es cuando hay orden en la conciencia.
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