Los ingleses nunca han deseado estar demasiado ligados a la Europa Continental.

Los ingleses tienen el sentimiento, sentir que viene de antiguo y está muy enraizado, que Europa es más misteriosa que el “Imperio”.Para los ingleses, al menos en la imagen que tienen de sí mismos, el mundo exterior significa una referencia; pero Europa no es algo a lo que deseen estar ligados demasiado estrechamente. Pueden ir a Birmania, Argentina o Sudáfrica, y hablar inglés y dirigir una empresa de propiedad británica o una economía al estilo inglés; irónicamente, eso no lo puedes hacer en Eslovenia, que resulta por tanto mucho más exótica.

Un ingles cuando se encuentra con alguien procedente de Calcuta o Jamaica, se siente cómodo, intercambiando referencias que van desde la literatura al criquet, lo que para nada ocurre en la misma medidas cuando son de Madrid, Bruselas o Berlín.