Democracia directa.

Es importante que las normas legislativas que se consideran fundamentales para la vida de los ciudadanos sean aprobadas por referéndum, es decir por democracia directa, y no por la decisión de unos partidos políticos;sobre todo cuando lo que se  legisla incumbe a las costumbres, tradiciones, formas de vida,alteraciones importantes de la “moral social” etc.

En España los partidos políticos siempre han tenido miedo de someter directamente a la voluntad de los españoles aquellas leyes de especial importancia.Un ejemplo de ello es el matrimonio entre personas del mismo sexo. En España el Partido Popular ha asumido como propio el matrimonio entre miembros del mismo sexo que aprobó el partido socialista. Los partidos políticos han hecho creer a sus votantes que esta ley era aceptada por la mayoría de los españoles en virtud de las "encuestas".

Sabemos que las encuestas se equivocan cuando se contrasta con lo que en realidad se vota en unas elecciones. En Eslovenia se ha votado un referéndum con respecto a la aceptación de sus ciudadanos del matrimonio homosexual. El resultado del mismo es que el 63,5% de los votantes se mostró contrario a las enmiendas que buscaban redefinir el matrimonio, y un 36,5% a favor del matrimonio gay. Sin embargo el resultado de la encuesta Delo Stik en Febrero de 2.015 aseguraba que el 59% de eslovenos apoyan el matrimonio gay. A la hora de votar parece que los eslovenos han demostrado lo equivocada que estaba la encuesta.

Las normas que afectan a la propia sociedad y a sus ciudadanos no deberían dejarse en manos de unos pocos.Se tendrían que aprobar mediante referéndum como se hace en muchos países de nuestro entorno.

Los políticos nos hablan de la Constitución como una ley suprema que fue aprobada en referéndum por todos los españoles, pero sin embargo durante el gobierno del señor Rodriguez Zapatero se modificó la Constitución sin contar con la opinión de los ciudadanos.

Si queremos transparencia y un mayor nivel democrático es necesario una democracia mas directa y utilizar el referéndum.Es la única forma de librarnos de ser siempre prisioneros de los partidos políticos.