China sigue aprovechando las capacidades de las nuevas tecnologías para estrechar el cerco sobre la disidencia al régimen comunista. Investigadores del Centro Nacional Integral de Ciencias de China aseguran haber desarrollado una inteligencia artificial con capacidad de leer la mente y medir el grado de lealtad al Partido Comunista Chino.La institución informó la semana pasada de que había desarrollado un estudio en el que había logrado evaluar las reacciones faciales y las ondas cerebrales de los participantes tras exponerlos a imágenes y audio con “el pensamiento y la educación política” del partido, que lleva más de 70 años gobernando el país del sol naciente con mano de hierro.El citado centro, en la ciudad de Hefei, llegó a publicar el pasado 1 de julio un vídeo en el que se mostraba el desarrollo del estudio junto con el artículo donde explicaba el hallazgo, pero ambos fueron retirados, según el periódico The Times.
Este control sobre la militancia es algo que China ya lleva a cabo con la aplicación móvil Xuexi Qiangguo (desarrollada por el gigante electrónico Alibaba), con la que el PPC obliga a sus casi 100 millones de miembros a ganar puntos visualizando vídeos, leyendo artículos y realizando cuestionarios sobre el ideario de Xi Jinping. Con esta tecnología, el Estado chino se ayuda para clasificar a sus ciudadanos como buenos y malos y a través de un sistema llamado crédito social otorgar puntos a los primeros y sancionar a los segundos, que incluso pueden pasar a integrar una lista negra o ser expuestos en público. “China está optando por utilizar estas tecnologías para perseguir el control sobre su gente y su represión de miembros de grupos minoritarios étnicos y religiosos”,apuntaba la secretaria de Comercio de Estados Unidos, Gina Raimondo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario