Corea del Sur, Hong Kong y Taiwán están ganando la lucha contra el coronavirus. A diferencia de China, pero también de algunos países occidentales, los tres gobiernos no han bloqueado las actividades económicas y no han limitado excesivamente la libertad de movimiento de los ciudadanos. Pueden salir de casa y caminar por la calle. Ahora bien, la población tiene que usar barbijos y guantes protectores y respetar el distanciamiento social.
La velocidad de acción ha sido la clave del éxito. Los tres países cerraron inmediatamente las fronteras con China, introduciendo rígidas medidas de cuarentena para quien entre en sus territorios. Las autoridades sanitarias luego realizaron test diagnósticos de masa con el fin de identificar a los posibles infectados, y controlar todos los contactos con otras personas. Todo esto fue acompañado de una total transparencia por parte de las instituciones, que han informado permanentemente a los ciudadanos sobre el desarrollo de la situación.
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