En el mundo pasan cosas que en la gran mayoría de casos no son contadas, o que son contadas escogiendo de forma cuidadosa lo que se deja saber a una opinión pública que si fuera consciente de lo que realmente sucede lo deploraría.
Noam Chomsky concibe al ser humano como un ser motivado por impulsos fundamentalmente buenos, que podrían conducir de forma natural a una organización más racional de la sociedad mundial, pero que, debido a la intervención de diversas fuerzas, son doblegados y se transforman en algo negativo, en la opresión de unos hombres por otros.
|
Noam Chomsky |
Unos pocos individuos muy poderosos económicamente llevan a una gran mayoría a desear ciertas cosas, que supuestamente les permitirán satisfacer ciertas necesidades. Esto, dice Chomsky, es irracional desde el punto de vista de la mayoría, una de tantas acciones irracionales de las que lleva a cabo la humanidad. Y sucede porque la racionalidad, casi siempre, debe conquistarse a través de un trabajo de documentación, de crítica, de independencia de juicio, y porque los canales de comunicación de la cultura dominante son de todo menos libres, y propagan ideas que en muchas ocasiones imposibilitan la difusión de un pensamiento racional sobre los asuntos mundiales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario