Muchas de las tensiones que rodean la educación son expresiones de las contradicciones en los valores. No es posible pedir una cultura del esfuerzo a los estudiantes si en la realidad en que viven inmersos prima el valor del ocio y la diversión. No podemos reclamar más autoridad en el mundo educativo cuando en otros ámbitos cualquier atisbo de autoridad se interpreta como autoritarismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario