Escribe el papa Francisco que con la misericordia, la justicia es más justa, se realiza realmente a sí misma. Esto no significa tener la manga ancha, en el sentido de abrir las puertas de las cárceles a quien se ha manchado con delitos graves. Significa ayudar a que los que han caído no se queden en el suelo. Es difícil ponerlo en práctica, pues a veces preferimos encerrar a alguien en una prisión para toda la vida en lugar de intentar que se reinserte en la sociedad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario