No sabemos cómo se transforman los fenómenos físicos en experiencias mentales (los sentimientos y las sensaciones, llamadas qualia por los filósofos, que aportan los elementos de la conciencia). Tampoco sabemos cómo, a partir de toda la diversidad de esas experiencias, surge la mente, esa realidad con propiedades unitarias como el libre albedrío y la conciencia de sí mismo que persisten a lo largo de la vida de un individuo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario