viernes, 7 de octubre de 2016

Los Reyes Católicos expulsaron a los judíos por un concepto religioso.

Los Reyes Católicos administrando justicia 
Cuando se habla de expulsión de los judíos en la España de los Reyes Católicos se usa una fórmula tan enfática como inexacta .No se expulsó a un pueblo, sino a un concepto religioso. Las medidas raciales de los últimos años han contribuido a confundir el problema, comparando esa expulsión con la del Tercer Reich, por ejemplo. Hitler intentó acabar con una raza, y todos los perseguidos lo fueron por tener abuelos de sangre judía y nombres judaicos. Los Reyes Católicos expulsaron una idea religiosa, no a un pueblo, porque, de haberlo hecho así, tendrían que haber empezado por echar a su tesorero Santángel, y a su Inquisidor, Torquemada, ambos de sangre hebraica, pero cuyos antepasados se habían convertido.

Era tal la preocupación más religiosa que racial con que se
veía ese asunto que, cuando los reyes se enteran de que algunos desterrados quieren convertirse y volver a España mandan que se les dé toda clase de facilidades, "porque les ha iluminado el Espíritu Santo" y prohibirán, por otros decretos que nadie se burle o les ofenda llamándoles "tornadizos". Pero, por otro lado, se advierte que esa conversión tiene que hacerse antes de que vuelvan. Y al judío que se encuentra dentro del territorio nacional, aunque diga que venía a convertirse, sea condenado a muerte (dramática prueba de la dureza de una reina de quien ahora se celebra el proceso de beatificación). Los Reyes Católicos no echaron a un pueblo que en gran parte se hizo cristiano.


Reyes Católicos
El judío convertido y entrado en una familia cristiana les tenía sin cuidado a los Reyes Católicos. Lo que les preocupaba es que era una minoría que estaba en desacuerdo con lo más importante que tenían los españoles de entonces, la religión. Una minoría que podía ayudar a una nueva invasión porque, sencillamente, no estaba identificada con el sentido religioso de sus compatriotas. Una quinta columna en suma. Resulta, hoy, difícil ponerse en su caso. La religión era entonces parte consustancial de la vida diaria, no un elemento ético o de conciencia. Lo más parecido a la seguridad del español de entonces de que sólo se podía ser católico, es la seguridad del español de hoy de que sólo se puede ser demócrata. Y de la misma manera que el liberal de hoy acepta todas las ideas, porque, en principio, todas las ideas son respetables, pero lucha con las armas contra un Hitler o un Mussolini como ataca al partido comunista o a las Panteras Negras, porque el triunfo de esos grupos equivaldría al final de esa misma democracia, igualmente parecía incomprensible al español de últimos del siglo XV que hubiera quien pudiera creer en otro Dios que el que murió en la cruz.

Los Reyes Católicos expulsaron una idea religiosa, no a un pueblo

No hay comentarios:

Publicar un comentario