Para Zygmunt Bauman el único significado que acarrea el término clase marginal es el de quedar fuera de cualquier clasificación significativa, es decir, de toda clasificación orientada por la función y la posición. La clase marginal puede estar en la sociedad, pero claramente no es de la sociedad; no contribuye a nada de lo que la sociedad necesita para su supervivencia y su bienestar; de hecho, la sociedad estaría mejor sin ella. El estatus de la clase marginal, tal como sugiere su denominación, es el de emigrados internos o inmigrantes ilegales o forasteros infiltrados. Personas despojadas de los derechos que poseen los miembros reconocidos y reputados de la sociedad; en pocas palabras, esta clase es un cuerpo extraño que no se cuenta entre las partes naturales e indispensables del organismo social. Algo que no se diferencia mucho de un brote cancerígeno, cuyo tratamiento más sensato es la extirpación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario